Allí estaba, el mundo de las criptomonedas, enfrentándose a una encrucijada. Una amenaza rosada desde el Despacho Oval, lanzada precisamente el pasado viernes, zarandeó los ya volátiles mares digitales. Donald Trump sacó a relucir una medida arancelaria sobre importaciones chinas, potencialmente del 100%.
El declive de titanes digitales
La noticia sacó el tapón del mercado de criptomonedas. Monedas de referencia como Bitcoin, Ether y Solana se hundieron, perdiendo grados vertiginosos en las subacuáticas profundidades financieras. Las olas de venta masiva tenían un sabor a un amargo naufragio impulsado por proteccionismo económico presidencial y confusiones globales.
Miami y CoinGlass, testigos silenciosos
Los ojos de la soleada Miami eran testigos silenciosos al derrumbe. CoinGlass, una notoria plataforma de analíticas experta en criptomonedas, informaba la alarmante cifra de liquidaciones superiores a los 18,280 millones de dólares. En la história reciente de cripto-activos, no habían vivido un día tan sombrío.
El precio del miedo digital
En mitad de la caída, Bitcoin cedió entorno a un 10% en apenas cinco días. Ether experimentó una caída aún más notable, derritiéndose casi un 14,2% en valor el mismo día. Mientras tanto, la prometedora Solana también sucumbía a la presión, desplomándose un 20%.
Trump y la postura cambiante
Lo curioso es que hace apenas poco, Trump pasó de ignorar por completo a Bitcoin – catalogándolo incluso como una burbuja sin base – a convertirse en un sorpresivo defensor de los activos digitales. Asombró al mercado permitiendo su inclusión en el plan de jubilación estadounidense. Sin embargo, aquella metamorfosis parece no haber durado mucho con la noticia del arancel.
El futuro incierto
Se vislumbran tiempos volátiles en el horizonte comercial global. Beijing, la contraparte en este juego de ajedrez digital, se ha puesto duro al aplicar mayores restricciones a la exportación de minerales de tierras raras. Esto no hizo más que echar gasolina al fuego en el mercado de cripto, dejando un ánimo de miedo y confusión.
Dato adicional: Los activos digitales forman parte del plan de jubilación estadounidense desde hace apenas poco tiempo, una medida revolucionaria que parece haber sido ensombrecida por la última amenaza arancelaria.
